El Urogallo (Tetrao urogallus), una de las especies más icónicas de la fauna ibérica, está en peligro de extinción. Su principal amenaza ya no es el furtivismo, sino la pérdida de hábitat. Valle de Arán.
Un macho de ciervo (Cervus elaphus) proclama su dominio al amanecer. Sierra de San Pedro.
Aquila fasciata. Una de las águilas más espectaculares de la Peninsula Ibérica. Sierra Morena.
Dos buitres leonados (Gyps fulvus) abren al máximo sus alas para parecer más grandes que su oponente. Sierra de Guadarrama.
Un precioso lince (Lynx pardinus) joven mira a la cámara sin desconfianza. Sierra Morena.
Este debe ser el mochuelo (Athene noctua) más adorable del mundo… Segovia.
Un precioso Martín Pescador (Alcedo atthis) surge de las aguas con las alas desplegadas. Ha fallado en su zambullida de pesca. Ávila.
Este gato montés (Felis silvestris) estaba cazando roedores en una vega cercana a Picos de Europa.
El Milano Real (Milvus milvus) tiene con su cola en abanico una silueta totalmente inconfundible. Sierra de Guadarrama.
El Águila Real (Aquila chrysaetos) es la auténtica reina de nuestros cielos. Sierra de Guadarrama.
Una escena única y conmovedora: cuatro cachorros de lobo ibérico (Canis lupus signatus) retozan al sol del amanecer. Picos de Europa.
La pobre libélula se ha convertido en el equivalente a un ramo de rosas, que le regala el enamorado abejaruco (Merops apiaster) a su dama. Calera, la Mancha.
Una escena que poquísimas personas han tenido el privilegio de presenciar: una osa (Ursus arctos) amamantando a su osezno. Alto Sil, Asturias.
Garzas y cigüeñas recortadas contra la marisma, iluminada por el sol del amanecer.
Oso pardo cantábrico (Ursus arctos) clava su mirada en mí. Aunque la foto está hecha a muy poca distancia, tanto él como yo estamos a salvo: hay una profunda garganta de montaña entre ambos.
En el Estrecho de Gibraltar es muy fácil ver orcas (Orcinus orca) durante el verano. Las crías de corta edad - como la que se ve en la imagen junto a su madre - tienen un tinte crema en los parches blancos.
Una lincesa (Lynx pardinus) me mira desde una piedra al sol. Estaba tan tranquila que se puso a acicalarse. Sierra de Andújar.
La siempre imponente figura de un águila real adulta (Aquila chrysaetos), con las primeras luces del amanecer. Sierra de San Pedro.
En noviembre, los machos cabrios (Capra pyrenaica) se enzarzan en espectaculares luchas, para mejorar su estatus en la manada, de cara a la época de apareamientos que tendrá lugar más tarde. Sierra de Gredos.
Estas tres Grullas (Grus grus) parecen estar discutiendo quien es la más alta y la más guapa. Laguna de Gallocanta, Aragón.
Este primer plano de un quebrantahuesos (Gypaetus barbatus) adulto muestra sus curiosos rasgos: el plumaje crema-anaranjado de la cabeza y pecho, la órbita roja del ojo, y la curiosa barba que le da su nombre. Buseu, en el Pre-Pirineo leridano.
El Urogallo (Tetrao urogallus), una de las especies más icónicas de la fauna ibérica, está en peligro de extinción. Su principal amenaza ya no es el furtivismo, sino la pérdida de hábitat. Valle de Arán.
Un macho de ciervo (Cervus elaphus) proclama su dominio al amanecer. Sierra de San Pedro.
Aquila fasciata. Una de las águilas más espectaculares de la Peninsula Ibérica. Sierra Morena.
Dos buitres leonados (Gyps fulvus) abren al máximo sus alas para parecer más grandes que su oponente. Sierra de Guadarrama.
Un precioso lince (Lynx pardinus) joven mira a la cámara sin desconfianza. Sierra Morena.
Este debe ser el mochuelo (Athene noctua) más adorable del mundo… Segovia.
Un precioso Martín Pescador (Alcedo atthis) surge de las aguas con las alas desplegadas. Ha fallado en su zambullida de pesca. Ávila.
Este gato montés (Felis silvestris) estaba cazando roedores en una vega cercana a Picos de Europa.
El Milano Real (Milvus milvus) tiene con su cola en abanico una silueta totalmente inconfundible. Sierra de Guadarrama.
El Águila Real (Aquila chrysaetos) es la auténtica reina de nuestros cielos. Sierra de Guadarrama.
Una escena única y conmovedora: cuatro cachorros de lobo ibérico (Canis lupus signatus) retozan al sol del amanecer. Picos de Europa.
La pobre libélula se ha convertido en el equivalente a un ramo de rosas, que le regala el enamorado abejaruco (Merops apiaster) a su dama. Calera, la Mancha.
Una escena que poquísimas personas han tenido el privilegio de presenciar: una osa (Ursus arctos) amamantando a su osezno. Alto Sil, Asturias.
Garzas y cigüeñas recortadas contra la marisma, iluminada por el sol del amanecer.
Oso pardo cantábrico (Ursus arctos) clava su mirada en mí. Aunque la foto está hecha a muy poca distancia, tanto él como yo estamos a salvo: hay una profunda garganta de montaña entre ambos.
En el Estrecho de Gibraltar es muy fácil ver orcas (Orcinus orca) durante el verano. Las crías de corta edad - como la que se ve en la imagen junto a su madre - tienen un tinte crema en los parches blancos.
Una lincesa (Lynx pardinus) me mira desde una piedra al sol. Estaba tan tranquila que se puso a acicalarse. Sierra de Andújar.
La siempre imponente figura de un águila real adulta (Aquila chrysaetos), con las primeras luces del amanecer. Sierra de San Pedro.
En noviembre, los machos cabrios (Capra pyrenaica) se enzarzan en espectaculares luchas, para mejorar su estatus en la manada, de cara a la época de apareamientos que tendrá lugar más tarde. Sierra de Gredos.
Estas tres Grullas (Grus grus) parecen estar discutiendo quien es la más alta y la más guapa. Laguna de Gallocanta, Aragón.
Este primer plano de un quebrantahuesos (Gypaetus barbatus) adulto muestra sus curiosos rasgos: el plumaje crema-anaranjado de la cabeza y pecho, la órbita roja del ojo, y la curiosa barba que le da su nombre. Buseu, en el Pre-Pirineo leridano.